Colección: Serafinita

Mucho antes de ser llamada serafinita, esta piedra verde se llamaba clorita. Este nombre proviene del griego Khloros que significa verde. La raíz de este nombre se encuentra en la clorofila, el pigmento vegetal que da el color verde a las plantas. Esta piedra verde debe su color a la presencia de partículas de mica.

Luego el nombre de clorita verde fue sustituido por el nombre comercial de serafinita, mucho más evocador. Este nombre de serafinita se le dio por su brillo plateado, que evoca las alas de los Serafines, un ángel descrito en una historia bíblica. Esta criatura celestial tiene 3 pares de alas. Lo encontramos en la Biblia alrededor del trono de Dios.

Esta piedra fue identificada muy recientemente por el mineralogista ruso Nikolai Ivanovich, a finales de la década de 1880. Gracias a su descubrimiento, este mineralogista se convirtió en director de la famosa “Asociación Imperial de Mineralogía” en San Petersburgo.

Este tipo de piedra está formada por sucesivas capas de aluminosilicatos y diversos elementos metálicos. Es una variedad gema de clinocloro, del grupo de las cloritas. También está compuesto por magnesio, aluminio, hierro y silicatos.

Por lo tanto, esta increíble piedra tiene fibras plateadas brillantes que recuerdan a las plumas. Pulir sus facetas revela una luminiscencia brillante.

No se atribuye ninguna leyenda ni mito a esta piedra. Sabemos que se utilizaba en la fabricación de ungüentos para desinfección y alivio de problemas de la piel.

Es una piedra blanda que tiene una dureza de 2 a 2,5 en la escala de Mohs. En comparación, el diamante tiene la dureza más alta, 10 en esta misma escala. Por tanto, esta piedra debe manipularse con cuidado. Su producción no es grande, por lo que tiende a aumentar de valor y su precio aumenta en consecuencia.

Los principales yacimientos se encuentran en Rusia.

En Litoterapia, la serafinita es una piedra que aporta bienestar y permite sentirse en armonía. Ayuda a uno a liberarse de traumas enterrados profundamente dentro de uno mismo y a avanzar en la vida. Capta energías emocionales para proporcionar un hermoso equilibrio interior.

Esta piedra empuja a su portador a salir de su zona de confort para encontrarse con los demás. Facilita el contacto con los demás, los intercambios y la compasión. Es excelente para personas introvertidas y que sufren de una dolorosa timidez. Alienta a las personas a superar situaciones de conflicto restableciendo la comunicación.

Se dice que la serafinita tiene un efecto similar al de la amatista en personas dependientes de ciertas adicciones como el alcohol, el tabaco y las drogas. Da fuerza y ​​voluntad a su portador. Se puede llevar con amatista, porque las piedras son complementarias.

También llamada la piedra de los ángeles, la serafinita genera la reconexión con el yo interior. Es excelente para la meditación. El usuario desarrolla una sensación de calma y serenidad.

Este fabuloso mineral verde aporta vitalidad, fuerza de carácter y ayuda a superar las dificultades de la vida como la pérdida de un ser querido, una separación romántica, un despido complicado. Su bonito color verde evoca la primavera, el renacimiento y la renovación. Es un gran apoyo durante los nuevos comienzos en la vida.